El autorretrato fotográfico es un viaje interior que no todos se arriesgan a hacer.
Es ideal contar con una buena autoestima o tener la capacidad de saber reírse de si mismo.

Antes era un poco más laborioso, a menos que tuvieras tu propio laboratorio, tenías que llevar tus carretes a una tienda y sonrojarte mientras la dependienta te entregaba un sobre con 36 fotos hechas de ti...por tí mismo, la mayoría de ellas fuera de foco o mal encuadradas. A una compañera universitaria los empleados de una tienda la veían con ojos sospechosamente zorrunos , luego supe que le molaba hacerse autorretratos desnuda. (Podríamos decir que era una Anna de los años 80).

El autorretrato en las artes plásticas suele ser muy revelador sobre el momento que se encontraba un artista.

En algunos cursos de fotografía se anima a hacerlo...incluso en un taller de actuación me invitaron para que organizara una sesión de autorretratos. La gente siempre descubre cosas que piensa que las tiene muy ocultas y resulta que están en la punta de la nariz, por más que se vea diariamente frente al espejo, o
que no sea capaz de ver lo que es obvio para los demás. Como en toda sesión, las mejores fotos surgen luego de muchos disparos, empiezan a aflorar detalles, miradas, posturas, que le sorprenden al mismo autor.

El caso de Anna es muy especial, eso lo sabemos todos desde que ella entró al foro y dejó bien asentada su personalidad, en cada uno de sus autorretratos es ella en todo su esplendor. Estoy seguro que hace sus fotos cuando ella se siente "mejor motivada" (esa frase es un guiño a Lorena) y por eso la pueden apreciar tan sublime. Creo que no hay ninguna persona que no se quede enganchada a alguna de esas fotos, o a todas. Es su mejor carta de presentación, totalmente naturales, sin ningún retoque. En ellas hay una gran sensibilidad, un buen gusto, una delicadeza de movimientos, un nosequé metafísico. Lo cierto es que cada vez que ella efectúa uno de sus viajes interiores de la mano de su Nikon frente al espejo, vemos belleza en estado puro. Es como un juego, pero no deja de ser un descubrimiento personal que ella decide
compartir con todos. Y está claro, para vuestra tranquilidad, de que Anna seguirá haciéndose sus autorretratos, porque ella y todos nosotros disfrutamos de sus avances.

Así como sucede con otras cosas y remitiéndonos a lo que es este foro..."así como el sexo", un buen retrato es un trabajo de dos. Está la confianza que otorga la modelo, la técnica que ponga el fotógrafo y la capacidad que tengan ambos para comunicarse. Creo que cualquier colega profesional entiende esto perfectamente y sabe apreciar cuando se llega a un alto nivel de complicidad durante la sesión. Pocas veces se da algo así, por lo que me siento muy orgulloso de las cosas que se han logrado con Anna. Y el hecho de ya haber realizado varias sesiones juntos, hace que se desarrolle entre ambos una comunicación muy especial en el momento de las fotos.

Llegado a este punto, aprovecho para contestar a mis amigos Plisson y Axelross, (que lo tenia pendiente), sí, hay formas muy sensuales para promocionarse sin necesidad de llegar a lo obvio o "mostrarlo todo". Si hay algo que disfruto es que las chicas que deciden ser mis clientes es porque buscan algo distinto, además de que se vean bellas, eróticas y posen muy dignas en sus fotos.

Me he topado con profesionales que tienen muy claro el perfil con el que desean presentarse, saben que en la medida que lo tengan bien definido, les vendrá determinado tipo de cliente. Hay otros casos que no lo tienen muy claro, y entonces vemos un book con fotos que de ser tan variadas pierden coherencia, pueden causar cierta confusión sobre cómo es en realidad la escort y qué ofrece. Por eso es conveniente que una sesión fotográfica sea también un asesoramiento profesional de la imagen.


Anna tiene un perfil muy bien definido entre sus clientes, es la novia que te envía mensajes con sus autorretratos mientras te espera desde la cama. Es la chica preciosa a la que siempre le acompaña un "áura muy bonita", como comentó cierta vez una forera. "La novia que le podría presentar a mis padres", según otro forero.
Es esa chica especial que de tanto insistirte que es normal, es lo que precisamente la hace más especial aún.
Pero Anna también es una aventura, es una mujer que le gusta inventar cada día y le gusta darse sus gustos, que luego de devorarse páginas de fotografía me muestra una lista de encuadres que le haría ilusión que busquemos...y yo le muestro las ideas que tengo en mente. En el momento de planificar una sesión, entran todos esos elementos que forman su perfil, porque si bien hay que ofrecer variedad, tiene que haber coherencia.

A un personaje así, que te saca lo mejor de tu lado artístico, se le llama Musa.
"Quién me diera una musa de fuego que os transporte al cielo más brillante de la imaginación.." W. Shakespeare

Equipo Nikon. Lentes fijos. Flashes de relleno. Luz natural. Rebotadores de luz.

Sara adora que le hagan fotos y la cámara adora a Sara. Es una mujer con mucha gracia y de figura muy cuidada, deportiva, ágil y de elegantes movimientos muy sexuales que la hacen de lo más felina. Tiene una mirada penetrante que te cautiva y seduce. Al mismo tiempo, es difícil permanecer serio delante de ella una vez le da por sonreirte.

Organizamos las sesiones en su piso para que pose con la lencería y un vestido muy elegante que le realza su figura. Hubo un momento del día en que entró una luz maravillosa, donde apenas se usó el flash para rellenar.
Una vez finalizada esa parte nos fuimos a la playa. La reacción de los pescadores "¡¡Guapa...Guapa!!" y la curiosidad de algunos bañistas, hicieron correr el bulo de que una famosa se estaba haciendo fotos, por lo que la bella Sara acabó de lo más glamorosa repartiendo autógrafos y posando con tíos que deseaban retratarse con ella, mientras miraba a cámara con esa sonrisa traviesa y cómplice. Es una mujer sumamente extrovertida, que con su cabello platinado y sus gafas de sol parecía una "pin-up" americana de vacaciones por Barcelona.
En exteriores, Sara se desenvolvió con movimientos muy rápidos que hay que cazar al vuelo. En una secuencia de 10 disparos seguidos puedes encontrarte con 10 posturas distintas. Más que la postura estática, Sara
es una mujer de acción. Parte de las fotos en el mar fueron aprovechadas para el concurso de la camiseta SMB, y estoy seguro que tendrán mucho éxito.

Merece mencionarse que la sesión de Sara fue un regalo que le hizo el forero Xac. El detallazo de su parte me conmovió tanto que le di un tratamiento especial a su gran amiga.

Equipo Nikon. Lentes fijos, 105, 35, 50 mm. Flash separado de la cámara. Luz natural.
Locación: CCB

Comentarios:
Diana necesitaba unas fotos profesionales para una sesión breve y fui recomendado por su amiga Lorena Mulata, quien me llevó al CCB. En las primeras fotos, sentí que faltaba algo, como ese puntito de sal o picante cuando estás en la cocina. A veces te pasa que tienes la intuición de que cuando retratas a alguien, puede que se te esté escapando algo importante, que puede sacar a relucir lo mejor de ella. No obstante que Diana colaboraba con su mejor entrega en unas posturas que la hacían más bella.

Me ausenté un minuto para buscar un lente que dejé olvidado en otra habitación y cuando regreso, al abrir la puerta la vi bailando una música que sólo sonaba en su mente. Diana movía sus brazos con movimientos muy suaves en tanto que sus caderas tenían vida propia, menéandolas con un ritmo que iba cada vez más y más rápido. A veces se llevaba sus manos a la cabeza, otras se acariciaba las caderas y el culo, de una manera salvaje y sensual. "...no te muevas..!!...quiero decir...Sigue...sigue...sigue bailando...!!", casi que le grité desde la puerta, donde empecé a fotografiarla. Ella se sonrió con su cabellera tapándole la mitad del rostro y siguió a su bola, relajándose aún más. A partir de ese instante supe cómo llevaría la sesión. Así que la puse a bailar en su habitación, en las escaleras y hasta en el terrado.

Diana es delgada, alta, unas piernas largas y una gracia muy brasileña al caminar. En un primer vistazo te da la sensación de que sea una chica tranquilita, pero verla en movimiento, verla bailar, irradia un erotismo tremendo. Yo de verdad que les recomiendo que la vean bailar o que bailen con ella en la habitación. La mayoría de las fotos que le hice fue en movimiento, batiendo sus cabellos y meneando el culo, siempre siguiendo el ritmo de la música que sentía en su cabeza. De haberlo sabido me traía unos CD's a la sesión.

Equipo: Nikon. Ópticas fijas muy luminosas. Diafragmas abiertos, velocidades bajas. Iluminación natural. Rebotador de luz.
Comentarios:
Kenza es una jovencita que se está iniciando en este mundo. Cuerpo fibrado, piel canela, de cabello negro precioso, (me recuerda a un estilo que llevaban algunas modelos en los años 70) y una mirada mágica. Es muy dulce de trato, con ese toque de timidez que llega a ser encantador y muy seductor. Aunque fui contratado para una sesión breve, hubo que manejarse con delicadeza, para que ella se sintiera a gusto y en confianza. Para el momento de las fotos, muchas cosas han sido muy nuevas para Kenza, no obstante que se mueve con una gran personalidad y decisión. Ayudó muchísimo el apoyo de Devorah, su compañera de piso. Cuando la puse a posar a cuerpo entero en el marco de la puerta, adoptó unas posturas muy elegantes, fue cuando la sentí más cómoda y en dominio frente a la cámara. La chica tímida que vi una hora antes, pasó a estar totalmente suelta, disfrutando ser fotografiada. Hubo un momento delicioso, ella se apoyó en la pared y de pronto volteó a verme con esa mirada profunda, muy propia de Kenza, llena de erotismo y al mismo tiempo inocencia , que atravesó mi lente 105 mm y me hizo pestañear el ojo puesto en el visor . "Espera, el sol me encandiló...jeje...Devorah..¿Me ayudas con el parasol?".