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CHICA
Nombre "artístico": Sandra Vera
Nacionalidad: (u origen probable) Argentina
Edad: (aparente y/o anunciada) 35
Fotos falsas o retocadas?: Reales, a cara descubierta
Descripción de Cara: Muy natural, bella. Siempre con una sonrisa.
Descripción de Cuerpo: Natural con curvas pero puestas todas en su sitio. Se cuida y se nota.
Descripción de Carácter: Implicada, natural, complaciente, amable, inteligente.
Vestimenta: Lencería negra
Fumadora: yo no note nada

CONTACTO
Teléfono: (whatsapp?)
Web/Anuncio: https://www.sexomercadobcn.com/golden-dream-girls-enric-granados-13x-bcn-622926836-blog-t440963.html
Dirección: ver blog
Horario: ver blog

LUGAR DE ENCUENTRO
Ambientación/decoración: Habitación grande con todo lo necesario
Aire Acondicionado/Calefacción: si
Valoración: 8

SERVICIO
Fecha de la experiencia: A principios de semana
Tarifa contratada: (€) 2 horas a 180 la hora
Otras tarifas ofertadas: preguntar a MIA (la celestina de los amantes)
Duración real del servicio: sin prisas
Besos/morreos: si, con pasión
Felación (con/sin protección):Sin. Espectacular. Hasta el final tiene suplemento.
Cunnilingus: Si
Relato del encuentro:

Hablé con Mia, la persona que prepara las citas para que el encuentro sea siempre de lo más especial. Ya la conozco y siempre me ha atendido con diligencia, discreción, respeto y atendiendo alguna petición por mi parte. Nada raro eh.. No seáis mal pensados.

Pues bien, Mia me explico que Sandra Vera es masajista titulada y como le pedí que necesitaba un masaje que me dejara extasiado, no dudo en hablarme de sus técnicas. Mi trabajo me tiene muchas horas sentado y mi espalda está llena de nudos.

Cuando Sandra me abrió la puerta me recibió con una sonrisa y una mirada de vicio que me dejo sin aliento. En persona es mucho más guapa que en las fotos, la verdad es que no le hacen justicia. Yo soy mucho de energías y solo darme el primer beso de bienvenida en la boca puede notar su energía. Su gran energía positiva.

Si a eso le sumamos que me susurró en la oreja con acento argentino "hola amor, tendrás una experiencia inolvidable" mientras con su mano derecha me rodeaba mi nuca, mientras que con sus pechos, como dos cántaros de miel, acariciaba mi pecho con los suyos de forma sutil y elegante. En este momento ya estaba bastante cargado de energía sexual positiva y como aquel que dice no había cruzado ni la puerta.

Después de un poco de charla muy sensual, me empezó a practicar el masaje. Ya estaba informada de lo que quería, que básicamente era que la primera hora fuera de masaje enérgico para mi espalda, pero altamente erótico e interactivo y vaya si lo consiguió.

Qué bendición de manos para quitarme nudos de la espalda mientras notaba como su vulva húmeda iba rozando mi cuerpo de forma sutil, como sabe cuándo parar para alargar el placer, cómo sincroniza su respiración con la mia para unirnos en un mismo éxtasis.

Cuando termino con la espalda yo ya quería darme la vuelta porque no podía más, pero me susurro en mi oreja que no me girara aun erizando todos los pelos de mi cuerpo y todo ello mientras mantenía mi pene en su mano. Obviamente, tuve que obedecer ante tal sugerencia. Se sentó por encima de mi cabeza, un poco de lado, de tal forma que mis ojos, nariz, boca, estaban situados en su entrepierna con orientación a su vagina.

Dios que bien olía, no podré olvidarlo jamás. Tampoco olvidaré que sin apenas tocarla yo a ella se notaba muy húmeda. Resumiendo, me hizo un masaje craneal mientras le practicaba uno de los mejores cunis que recuerdo. Notaba como se estremecía de placer y me apretaba más con las manos en la cabeza para que no parara, sólo me detenía para mirarle a los ojos y ver la cara de excitación de Sandra.

¡Y todo esto si dejar de masajear mi cabeza! Increíble. Cuando llevábamos un rato, note que empezaba a acariciarme el pene muy suavemente y por un momento pensé: "si tiene las dos manos en mi cabeza...", pues sí, efectivamente, con su pie derecho hizo que tuviera uno de los orgasmos más intensos que recuerdo. Creo que el suyo también fue intenso.

A los quince minutos de ambos llegar al éxtasis me dijo: "ahora si puede darte la vuelta" y muy lentamente empezó a darme un masaje por delante, empezando por los pies, pero estaba sentada como si estuviera haciendo un 69 con lo que ya os podéis imaginar las vistas que tenía. No había llegado ni por las rodillas con el masaje que mi pene volvía a estar erecto, ella lo sabía perfectamente y empezó a masajear con sus pechos mi pene, muy lentamente mientras iba acercando su flor a mi cara pero sin permitirme llegar... Creo que eso me puso muchísimo.

Mantuvo esa tensión sexual unos minutos, hasta que no pude más, le agarré ese trasero tan espectacular, con energía, pero con la mayor de las delicadezas posibles y empecé a degustar como si no hubiera un mañana, a lo que ella me respondió con otra degustación.

Fue tan intenso que en muy poco tuve que pedirle que parará para no terminar.... Hubiera terminado porque el momento era maravilloso, pero no quería terminar sin poder usar la goma y sabía que un tercero iba a ser imposible.

Se nota que Sandra es una mujer con tablas, qué manera de moverse en varias posturas y privilegio poder terminar de pie con ella de espaldas, apoyada en la pared mientras le cogía la mano y nos besábamos sin rompernos el cuello por la postura ...

Sin duda pronto repetiré...


Valoración de la experiencia: 9
Valoración final: (lo mejor/lo peor) Todo bueno, nada mala.

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Lextor

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