Reconozco que cuando se realiza una tercera sesión a una chica en un mismo lugar existe el oculto temor a repetirse. Lo cierto es que cuando alguien desea repetir con tus ojos y tu cámara, hay el gran compromiso de superar el trabajo anterior. Uno lo asume como un desafío. Es algo que va más allá de la amistad que se tenga. Es un tema de confianza.

Ayuda mucho que Sheila parezca una caja de Pandora hecha mujer, porque siempre te está sorprendiendo. Nuevos looks, nuevas ideas, nuevas técnicas, nueva web. Estudio redecorado, con nuevas luces, nuevos colores, nuevo mobiliario.

Ella no para, la puedes ver que te encandila con esos ojazos y una voz tan serena capaz de domar a un lobo salvaje, sientes que se mueve con tal suavidad por el pasillo, como si flotara en lugar de caminar...pero su creatividad va a 200 KPH. Cuando me dice con esa dulzura que tiene "Daniel...¿qué te parecería si...?", sé que debo estar preparado.para una de sus nuevas ideas.

Sheila es de los seres que yo más admiro, es de esas personas que te saca a relucir tu mejor lado, es capaz hasta de levantarte y mandarte a pulirlo.

El forero Un Pajarito en su última experiencia con ella lo resume en una sola frase:

"Conocerla es indispensable para encontrar la felicidad."

Sheila le imprime a todo su sello personal, único, que por supuesto, se siente sin lugar a dudas en su técnica del masaje Yemmei, como bien la describe el forero Pixapins en su más reciente experiencia:


Honestamente, lo que más me gusta del resultado final de esta sesión, fue haber captado mejor que nunca el hechizo que tiene la mirada de Sheila Yemmei.